Las herramientas

Proviene de la fusión de Lean e Industria 4.0. Esta es la nueva tendencia aparecida sobre el 2015. Es más una evolución que una revolución, como lo sucedido con Lean Six Sigma. 

El objetivo es acelerar el ritmo de mejora proveniente del Lean mediante sus eventos kaizen, gracias a la aplicación de nuevas tecnologías que son cada vez más accesibles y ayudan a adaptarse a los cada vez más frecuentes cambios en los patrones de demanda. 

Conjuntándolas se obtiene lo mejor de ambos mundos, aplanando el camino para la transformación de empresas actuales en 4.0. 

La implementación de Lean por métodos clásicos, no tienen sentido en las organizaciones actuales, donde todo el ecosistema ha cambiado y cada vez es más VUCA (Volatility, Uncertainty, Complexity, Ambiguity). De hecho, está destinada al fracaso, nuestro mundo y las exigencias actuales no tienen nada que ver con las originales. 

Puntualizar que las herramientas Lean siguen siendo óptimas para mejorar de forma acelerada nuestras organizaciones, adecuando los métodos y las tecnologías a las circunstancias actuales. Consecuentemente hemos de huir del método y el enfoque tradicional que nos proporcionan los hasta ahora líderes de la mejora continua. Estos perfiles deben ser actualizados a 4.0 y enfocados hacia el nuevo entorno en lugar de vivir en el pasado. No debemos caer en la trampa de implementar un sistema obsoleto para mejorarlo con la tecnología o peor aún pensar que simplemente implementando un automatismo ya tenemos una mejora. 

Hemos de rediseñar el proceso con las herramientas pertinentes y actualizadas contemplando la tecnología adecuada para generar el proceso más eficiente desde un inicio. Nuestra obligación es mantenernos despiertos para ver las oportunidades de mejora y ser autocríticos para evolucionar hacia la excelencia. 

Por otro lado, la tecnología ha de ser utilizada para añadir valor a nuestra organización: con monitorización del sistema en tiempo real, control de inventarios en diversas sedes, seguimiento de KPI’s, mantenimiento, etc. 

El salto tecnológico no está vinculado a grandes inversiones en las organizaciones. Todo lo contrario, se trata de invertir en definir qué es lo que necesito para convertir mi organización en más competitiva. Todo esto es perfectamente compatible con Lean 4.0 como ejemplo los sensores son cada vez más económicos y proporcionan mayor información, siendo fácilmente vinculables a les sistemas que utilizamos a diario como en su día fueron los Poka-yokes como sistema anterior en Lean original